La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha situado la caída del producto interior bruto (PIB) mundial para 2020 en el 4,2%, lo que supone una mejora de tres décimas con respecto al descenso del 4,5% que había pronosticado en septiembre, según se desprende del informe bienal ‘Perspectiva Económica’, publicado este martes.
«Por primera vez desde que empezó la pandemia, ahora hay esperanza para un futuro más brillante. El progreso con las vacunas y los tratamientos ha elevado las expectativas y la incertidumbre ha descendido», ha subrayado la economista jefa del organismo con sede en París, Laurence Boone.
Por el contrario, la OCDE ha decidido revisar a la baja el crecimiento para 2021 al 4,2%, ocho décimas menos que en sus previsiones de septiembre. Para 2022, el organismo con sede en París ha atribuido al PIB mundial un alza del 3,7%.
«Esperamos que la recuperación sea desigual entre los países, potencialmente produciendo cambios duraderos en la economía mundial», ha agregado Boone, explicando que China, que comenzó antes su recuperación, supondrá un tercio del crecimiento mundial. Al tiempo, la contribución de Europa y Norteamérica será menor que su peso en la economía mundial.
La OCDE ha asegurado que sin el apoyo político «masivo» que pusieron en marcha los países, «la situación social y económica hubiera sido calamitosa». Además, el organismo considera que «se ha evitado lo peor» y que se ha preservado la mayor parte del tejido económico, aunque ha alertado de que la situación sigue siendo «precaria» para personas, empresas y países vulnerables.
DATOS POR PAÍSES
De acuerdo a las nuevas perspectivas, Estados Unidos registrará una contracción de su PIB del 3,7% este año, mientras que en 2021 avanzará un 3,2% y en 2022, un 3,5%. Con anterioridad, la previsión era de una caída del 3,8% este año y de un incremento del 3,5% el próximo.
Las estimaciones para el conjunto de la eurozona también han mejorado con respecto a septiembre. Ahora, la OCDE pronostica una caída del PIB del 7,5%, frente al 7,9% anterior, al tiempo que en 2021 el crecimiento será del 3,6%, casi dos puntos y medio más. La mayor economía europea, Alemania, caerá un 5,5%, frente al 5,4% estimado anteriormente, mientras que en 2021 la OCDE estima que avance un 2,8%, frente al 1,2% anterior.
De su lado, Francia experimentará una caída de su PIB del 9,1%, lo que supone una mejora de cuatro décimas en comparación con las previsiones anteriores. Para 2021, el incremento ha mejorado en más de cuatro puntos porcentuales, hasta el 6%, tras lo cual seguirá un alza del 3,3% en 2022. En lo que respecta a Italia, la mejora en las previsiones ha sido de 1,4 puntos porcentuales, hasta una caída del 9,1% en 2020, mientras que el alza para 2021 se ha revisado hasta el 4,3%, desde el 0,8% de septiembre.
La previsión de este año para China se ha mantenido, por lo que crecerá un 1,8% a pesar del impacto económico de la pandemia. Sin embargo, la recuperación más rápida de lo esperado ha provocado que la OCDE prácticamente duplique sus perspectivas para 2021, hasta un crecimiento del PIB del 8%, frente al 4,4% anterior. En 2022, la economía china se expandirá un 4,9%.
«La actividad económica continuará con menos interacciones cara a cara y fronteras parcialmente cerradas por algunos trimestres más. Algunos sectores ganarán fuerza, otros se mantendrán sin cambios. Las economías emergentes o en desarrollo, donde el turismo es importante, seguirán viendo su situación deteriorarse y necesitarán más ayuda internacional», ha apostillado la economista jefa de la institución con sede en París.