La patronal aérea se propone reducir las cancelaciones y los retrasos de vuelos

El presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara, aseguró este miércoles que se han marcado como objetivo acabar con el aumento en las cancelaciones y los retrasos de vuelos, o al menos reducirlos sustancialmente.

Gándara explicó que una de las medidas que propone ALA es la creación de una mesa de alto nivel del transporte aéreo. “Contaremos la propuesta al Ministerio de Fomento y, entre otros actores, AENA, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea y las aerolíneas deberían formar parte de esta mesa de trabajo”, explicó en una rueda de prensa para valorar los resultados de la temporada de verano.

Además, el presidente de ALA destacó que esta mesa también serviría para “hacer presión como país en los organismos que toque a nivel europeo”. “El aumento de los retrasos y cancelaciones no es un caso aislado español, es un problema europeo debido a la gran congestión del tráfico aéreo”, apostilló.

Además, Gándara denunció que “la situación geográfica de España, además, la hace mucho más propensa a este tipo de retrasos por congestión que otras zonas europeas”. “Solo el 25% de los retrasos de vuelos en España son causados en nuestro país, se trata de un problema que habría que arreglar a nivel europeo”.

En los últimos 12 meses los retrasos y cancelaciones han crecido un 60,5% en toda Europa, según datos de Eurocontrol. Además, España cuenta con problemas en cuanto a ubicación y meteorología, algo que perjudica aún más a la franja mediterránea y Cataluña en particular.

“Francia es la puerta de entrada desde y hacia Europa para nosotros. Por tanto, nos afecta muchísimo. Igual que nos afecta que Marsella sea el aeropuerto con más retrasos por congestión, especialmente a Barcelona”, explicó Javier Gándara.

De todos modos, la ubicación no es el único problema que afecta especialmente a la zona del litoral mediterráneo, también está mucho más perjudicada por la meteorología. Los retrasos por estas razones han crecido un 123% en lo que va de 2018, aunque no son los únicos. El número de retrasos por congestión también se han incrementado. En este caso, un 112% en lo que va de 2018 respecto al 2017.

Además, este agosto ha sido el mes con más descargas eléctricas desde que estas se contabilizan. “Los aviones están preparados para recibir un impacto de un rayo, pero hay que tener en cuenta que estos van asociados a tormentas y una serie de fenómenos meteorológicos que hacen que haya que desviar el tráfico”, aseguró Gándara.

El presidente de ALA recalcó que este tipo de fenómenos cada vez son más impredecibles. Además, los aeropuertos españoles encabezaron el ranking de retrasos por estos motivos durante el pasado mes de agosto. El de Palma de Mallorca se situó primero y el de Barcelona, tercero.

Estas problemáticas concretas hacen que el aeropuerto de Barcelona-El Prat sufra muchas más cancelaciones y retrasos que el Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Barcelona fue el único aeropuerto español que se coló en el listado de los 10 aeropuertos europeos con más cancelaciones durante este verano.

Mientras que el aeropuerto de Madrid consiguió que el 76% de sus vuelos salieran puntuales durante los pasados meses de junio, julio y agosto, esto solo sucedió en el 56% de los casos en Barcelona-El Prat. La media de los grandes aeropuertos europeos se situó en un 63%, según datos de Flighstats.

LA LUCHA DE LA INDUSTRIA

El presidente de ALA quiso destacar que “las aerolíneas hemos asumido que no es una circunstancia externa, sino la nueva normalidad a la que tenemos que hacer frente y estamos aplicando muchos recursos para evitar y mitigar el impacto de estos problemas en los pasajeros”.

“El transporte aéreo es un sistema complejo en el que cada uno cumplimos un papel esencial, por lo que es imprescindible que el resto de actores tengan un grado de implicación similar”, indicó Javier Gándara.

El presidente de la patronal, además, destacó que el tráfico aéreo “aún debe y puede crecer más”. “Pero esto no puede suceder a costa de tener un peor servicio porque cada vez hay más retrasos y hay que luchar para que esto no pase consiguiendo reducir los niveles de congestión para que el tráfico aéreo pueda seguir creciendo”, apostilló.