¿Y qué dicen los banqueros?

 

Para el sector, la reforma del sistema financiero va en la buena dirección, pero hace falta más para que fluya el crédito. Y es que en detalle, de esos 50.000 millones de euros el Gobierno exigirá una provisión específica de 25.000 para hacer frente a los créditos con más problemas de recuperarse.

El Ejecutivo también pide un colchón de capital para suelo y promociones en curso de 15.000 millones y una provisión genérica de 10.000 para el crédito actualmente sano. Un dinero que tendrá que salir de los beneficios de las entidades este año, por lo que la banca augura que necesitará más tiempo para reestablecer el crédito.

Según los cálculos de Economía, al final del proceso, las entidades llegarán a cubrir con este capital adicional hasta en un 80% las pérdidas derivadas de su inversión en suelo, el 75% para las que registren entre las promociones en curso y del 35% para los pisos ya acabados.

BBVA SE DESENTIENDE DE BANKIA

La reforma contempla que si las entidades se fusionan, los bancos tendrán un año extra para cumplir los requisitos. En este sentido, el consenso miraba con escepticismo la capacidad del Banco Financiero y de Ahorros para hacer frente a las nuevas exigencias. Pero frente a los rumores de un noviazgo con el BBVA, el presidente de la vasca lo desmiente.

Por su parte la de Rato quiere despejar las dudas sobre su potencial. BANKIA asegura que puede con la reforma: prevé cubrir las provisiones mediante recursos como deuda subordinada, participaciones preferentes y provisiones genéricas.

También mediante la venta de activos no estratégicos. En concreto -dice la entidad- las preferentes y subordinadas del grupo llegarán a los 6.300 millones de euros