Jarro de agua fría, por tanto, a las suposiciones de que Mario Draghi volvería a la compra de bonos tras la declaraciones de otro de sus colegas. El también presidente del Bundesbank ha subrayado que el programa de compra de estos instrumentos en los mercados secundarios no está diseñado para contener los intereses de la deuda de ningún país en particular.

Advertencia también sobre las subastas de liquidez a tres años. Reconoce que calmaron temporalmente a los mercados pero,subraya, existe el riesgo de crear una "dependencia”.