Fernando Luque: “Me creo más esta estimación de una caída del 1% que la anunciada en noviembre”

La principal referencia esta jornada ha sido ese anuncio de la Comisión Europea de sus nuevas previsiones de crecimiento para la Eurozona y sus países miembros en 2012. Un dato realmente negativo, pues las estimaciones comunicadas esta mañana por el comisario Olli Rehn son más pesimistas que las que se manejaban en noviembre del año pasado. En lo que respecta a nuestro país, el gobierno comunitario estima ahora que el PIB español caerá este año un 1%, frente a su anterior previsión de crecimiento de un 0,7% en el ejercicio. Aún así, esta cifra sería mejor que la apuntada por otros organismos como el Fondo Monetario Internacional, y según Fernando Luque, no tendría por qué coger por sorpresa a los inversores. A su juicio, hace tiempo que se cuenta en los mercados con un hipotético escenario de menor crecimiento e, incluso, de  recesión en España.

2001-2011. Buena década para los bonos españoles a largo plazo, mala para los fondos.

Tres profesores del IESE han presentado recientemente un estudio en el que analizan la rentabilidad ofrecida en la última década por los fondos de inversión en nuestro país. Una de las principales conclusiones obtenidas por estos expertos es que la rentabilidad ofrecida por la deuda pública española en estos últimos diez años ha superado con amplitud la marcada por los fondos de inversión en igual período de tiempo. Los datos estadísticos lo dejan muy claro: los bonos del Tesoro con un vencimiento de diez años han conseguido una rentabilidad anualizada en la última década del 5,3%, frente al 1,3% de media de los fondos.

Fernando Luque reconoce que los datos aportados por los profesores del IESE son correctos. “En esta última década, por lo general, los fondos no han tenido un buen comportamiento, y menos aún si los comparamos con la deuda pública”, añade. Sin embargo, el editor en España de Morningstar considera inapropiada la comparación de un índice de referencia como el comportamiento de la deuda pública con la totalidad de los fondos de inversión. “No se pueden comparar peras con manzanas”, explica Luque, quien apunta además a que en los últimos años ambos instrumentos de inversión han vivido circunstancias bastante distantes entre sí. Por un lado, los fondos de inversión han vivido una década “especialmente mala”, mientras que el bono español a largo plazo ha registrado un comportamiento inusitadamente positivo. El experto subraya un importante elemento a tener en cuenta para entenderlo, y es que, a su entender, esta deuda pública se ha visto beneficiada por unos tipos de interés históricamente bajos que han movido con fuerza su demanda.

Los fondos de inversión, la mejor opción para controlar el riesgo

Lo cierto es que, pese a todo, Luque entiende que haya inversores que a partir de este estudio se planteen la conveniencia o no de invertir a través de fondos de renta variable, por citar un ejemplo, en vez de hacerlo con la compra individual de acciones. No obstante, el experto subraya que al invertir a través de un fondo de inversión se asumen menores riesgos, ya que al contar con un mayor número de valores en cartera se puede evitar el peligro de verse con unos títulos cotizando o muy por encima o muy por debajo del movimiento de los índices. Para dejarlo más claro, Luque cita un ejemplo que contemplaría la hipótesis negativa: “si el año pasado un inversor particular hubiera apostado por una cartera formada únicamente por ArcerlorMittal, Técnicas Reunidas y Gamesa, habría sumado unas pérdidas que triplicarían las del Ibex35”. Con ello, el editor de Morningstar en España quiere resaltar la que es, a su juicio, la gran ventaja de los fondos de inversión, su mayor control del riesgo.