La tijera Europea no deja país sin recortes.
En el día en el que Senado italiano celebra la votación final del plan de ajuste de más de 30.000 millones de euros, aprobado por la Cámara de los Diputados el pasado viernes, Bélgica sale a la calle.
Después de sufrir un vacío de Gobierno de casi dos años, el país afronta una huelga general del sector público para protestar contra los recortes anunciados por el nuevo Gobierno.
En especial, lo que menos ha gustado a los sindicatos belgas es la reforma del sistema de pensiones.