Indra ha publicado sus cuentas, que muestran un beneficio neto de 144,8 millones de euros hasta septiembre, lo que supone un 1% más que un año antes. Javier Marín, director de relaciones con los inversores de Indra explica que la clave para esta mejora ha sido el negocio internacional, que es uno de los motores de crecimiento de la compañía.
Las ventas internacionales han crecido un 10% y la contratación un 9% en mercados internacionales, lo que muestra que la compañía sigue reforzando su cartera de pedidos. Consigue contratos nuevos, lo que es un valor añadido a las ventas.
En cuanto al desarrollo de la compañía en nuestro país, el mercado internacional es una apuesta estratégica, pero Indra es una compañía española con presencia e historia en España. Actualmente la demanda está floja dentro de nuestras fronteras, pero desde Indra consideran que los resultados conseguidos en España son reseñables, ya que el mercado doméstico está por encima de la unidad.
Para el final del ejercicio la firma espera cumplir con sus objetivos y que la parte internacional compense a la nacional. “Hemos reiterado nuestros objetivos para el año, que se hicieron públicos a principios del ejercicio, un ejercicio que ha sido complicado. Ha sido difícil, pero vamos a perseguir cumplir los objetivos que nos marcamos”.
A la pregunta de si va a mejorar pronto o no la situación en España, es difícil responder, pero desde Indra aseguran que se ha demostrado durante la crisis es una compañía resistente al ciclo, pero no inmune. “Sí vemos que aunque el año se ha complicado, pero no prevemos esa implosión por la que algunos jugadores de mercado apuestan”. La compañía confía en que los clientes siguen con ganas de hacer cosas y subrayan que llevan años con inversión en desarrollo de tecnologías de la informática. Y es que hay un percepción creciente de la importancia de estas tecnologías en el desarrollo de los negocios y no solo en el mundo corporativo, sino que es la propia administración la que apuesta por aumentar el servicio a los ciudadanos por medio de la tecnología. Por tanto Indra seguirá apostando por los clientes españoles, igual que ellos apuestan por Indra.
