El presidente de Olympus, Shuichi Takayama, tiene previsto dimitir hacia finales de enero, en respuesta al escándalo de las irregularidades financieras de la compañía destapado el pasado mes de octubre.
La decisión viene motivada por la conclusión del informe de la investigación llevada a cabo por abogados de la empresa, el cual establece que más de diez altos cargos de la compañía son los responsables del fraude contable.
Y es que éstos no alertaron de las prácticas contables ilegales, pese a haber sido informados de las costosas adquisiciones que se hicieron para tapar las cuantiosas pérdidas de la empresa.
El documento concluye que Olympus debe reclamarles más de 900 millones de euros en materia de daños. La mayor parte del montante deberá ser abonado por el ex presidente, el ex vicepresidente y el ex auditor.