Rafa Nadal, leyenda viva en Roland Garros

Rafa Nadal y Novak Djokovic se han visto las caras de nuevo. Y no podía ser de otra manera que en la final de París, en Roland Garros, epicentro de la tierra batida, y torneo reservado para los más grandes. El serbio buscaba defender sus condición de líder en la clasificación de la ATP, mientras que el manacorí perseguía hacer historia convirtiéndose en el primer tenista en ganar por séptima vez Roland Garros. Dicho, y hecho. El tenista español se ha convertido en una leyenda viva del torneo parisino, y ha alzado por séptima vez el 'Trofeo de los Mosqueteros'.

Y lo ha hecho en un duelo para el recuerdo, marcado por el buen juego, y por la suspensión del partido a mitad del encuentro y durante un día a causa de la lluvia. 6-4, 6-3, 2-6 y 7-5 ha sido el resultado final, más ajustado que la superioridad reflejada por el campeón español.

A sus 26 años y con un currículo envidiable, el balear ha asegurado que quiere "saborear lo que es ganar en París". Tranquilo y feliz, ha confesado que esta victoria le "impulsa a seguir trabajando en la misma línea para alcanzar nuevos objetivos".