29 de marzo, huelga general

29 de Marzo. El día en el que los sindicatos lanzan un órdago al Gobierno por la reforma laboral, con el objetivo de bloquear el país. En juego hay hasta 4.000 millones de euros, que sería el coste de la jornada si la huelga general fuera totalmente seguida. Sin embargo, más allá del coste económico, este 29 de marzo tiene cosas más importantes en juego. En primer lugar: que se respete el derecho a la huelga, pero también el derecho al trabajo de aquellos que creen (o creemos) que es momento de arrimar el hombro.

En juego está también la credibilidad internacional de España y, por ende, de nuestras grandes, medianas y pequeñas empresas. La imagen de un país parado por la huelga, en vísperas del mayor recorte de la historia y del parón que va a provocar la  Semana Santa, no es la mejor manera de recuperar la confianza perdida en los últimos días en los mercados.

Veremos el seguimiento de la jornada. Los sindicatos dicen que masivo, a la vista de los datos. El Gobierno lo minimiza. Es lo normal en estos casos. Sin embargo, hasta ahora conocemos datos de las grandes industrias, y los servicios públicos. Eso es lo que le importa a los representantes de los trabajadores, y lo que usarán para medir su éxito.

Pero se olvidan de algo esencial: su representación es limitada. No llega a la cuarta parte de los trabajadores. La PYME es quien genera el 80% del empleo en nuestro país. Ahí es donde realmente está la fuerza laboral. Y  sin embargo, no cuentan para los representantes de los trabajadores. Y es ahí, exactamente, donde se va a medir el impacto real de esta jornada de huelga.

Los sindicatos lanzan hoy su último órdago con la Reforma Laboral, en un intento por no perder la cuota de poder a la que están acostumbrados. Reclaman diálogo. Pero olvidan que han tenido 3 años para alcanzar un acuerdo con la patronal. La situación y los mercados exigen soluciones. Mejores o peores. No sabemos cómo serán. Pero con 5 millones y medio de parados, una deuda pública aumentando, y con tipos de interés por encima del 5% para nuestra deuda, es momento de reformas. Con diálogo o sin diálogo.