Réquiem por los opositores

Para los que no lo hayan conseguido, mi más sentida felicitación. De la que os habéis librado, chavales, chavalas. Os habéis quitado de encima asistir, desde el vagón de cola, recién llegados, apenas sin afeitar y con cara de sueño, al desmantelamiento progresivo, imparable, obtuso, inmisericorde y con precisión de cirujano del Estado del Bienestar. De él no van a quedar ni los gusanos. Ya no interesa. No hay ogros comunistas que contrapesar y dirigir escuelas públicas no supone chollo alguno para los tenderetes de los amigos de quienes gobiernan.

Para los 350 que hoy descorchan botellas de espumoso, mi más sentido pésame. Primero veréis cómo os recortan la nómina, una y mil veces. Luego os quitarán los trienios, los sexenios y otros complementos. Después os arrancarán los consorcios sanitarios y otras ventajas sociales. Y por último os echarán del empleo para toda la vida. Y si os suena a Bertolt Brecht, sí, es con el mismo espíritu que Bertolt Brecht. Para vosotros, que lo habéis conseguido. Y para los otros 11.250, que se han quedado a las puertas.