La cara del día ha sido el exconsejero de Solidaridad y Ciudadanía y actual diputado de las Cortes de Valencia, Rafael Blasco. Éste ha sido condenado a 8 años de cárcel por desviar ayudas financieras que iban directamente a proyectos de cooperación en Nicaragua. La partida que ascendía a 1.5 millones de euros estaba destinada a trabajos de agua potable y canalización.

¿En qué se gastó el dinero? Se gastó en la compra de 3 inmuebles y un garaje en Valencia, acondicionar dichas propiedades y ponerlas a punto con todas las comodidades, hasta el punto de comprar kleenex. Tanto es así, que en la sentencia, el Tribunal Superior de Justicia de Valencia califica los hecho de «aberración».