Las cifras de las personas en situación de paro han vuelto a subir en el mes de octubre con un incremento de 49.558 nuevos desempleados.

A pesar de ser el menor aumento desde 2016, hay que tener en cuenta que este dato no recoge a aquellos trabajadores que se encuentran en suspensión de empleo o reducción horaria como consecuencia de un ERTE.

En un panorama más que incierto, urge poner en marcha un programa estructural serio destinado a la recuperación y el fortalecimiento del tejido industrial y, por consiguiente, a la recuperación de puestos de trabajo.