“En este momento hay en el mercado rentabilidades por dividendo increíbles”

Más que por valores que hayan sufrido importantes recortes de precio durante la crisis, el director de Skipper Capital EAFI aboga, a la hora de construir una cartera de inversión, por aquellos que aporten un dividendo interesante y estable en el tiempo. Una característica a la que deben ir unidos, además, unos buenos fundamentales. “Buscamos empresas con un negocio diversificado, buena presencia internacional y marca reconocida”, explica Manzanares. Cita el experto un ejemplo dentro de nuestro país, Iberdrola, aunque reconoce que al ser el negocio eléctrico un sector altamente regulado, en época de crisis esa condición puede constituir un problema, pues podría, por ejemplo, verse obligada a variar sus tarifas.

El también profesor del IEB insta a tener especial atención al dividendo y, aunque pueda parecer contradictorio, recomienda evitar rentabilidades exageradamente altas. “Las empresas que reparten un mayor dividendo tienen también por lo general menos perspectiva de crecimiento”, explica José María Manzanares. Su apuesta iría dirigida a compañías que, además de retribuir la inversión del accionista, defiendan la reinversión de capital en busca de continuar creciendo. “Lo que buscamos es un modelo de negocio en el que el 50% de lo obtenido se reparta en dividendo, y el otro 50% se invierta en el propio crecimiento de la compañía”, sentencia.

La situación en Europa, “complicada”

José María Manzanares entiende que las operaciones de refinanciación llevadas a cabo por el BCE han funcionado en algunos aspectos, pero no han sido la solución para otros tantos. El experto destaca que el dinero obtenido por estas medidas extraordinarias de la institución dirigida por Mario Draghi lo han utilizado los bancos europeos para acudir a las subastas de deuda soberana. “Las entidades han obtenido una financiación al 1% para después, con ese capital, comprar bonos al 3 o al 4%”. No obstante, Manzanares subraya el efecto beneficioso logrado por el BCE sobre la confianza en el Viejo Continente y el movimiento de liquidez en los mercados. Ahora bien, entiende que el hecho de no contar con una unión fiscal ha delimitado mucho hasta ahora el poder del BCE para poder invertir la situación. De cara al futuro próximo, sus previsiones no distan mucho de lo que estamos viendo hoy en los mercados. A su juicio, nuevos factores, como las elecciones a celebrarse en Grecia y Francia, podrían recrudecer la volatilidad en las bolsas europeas.