Ana Botín asegura que Banco Santander no está interesado en fusiones

La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha vuelto a descartar que el grupo esté interesado en participar en fusiones, pues para ello sería necesario que en Europa tuviesen lugar cambios en la regulación.

Así lo ha señalado este miércoles durante la presentación de resultados del cuarto trimestre de 2020 ante analistas e inversores, en la que ha insistido en que el grupo buscará un crecimiento rentable invirtiendo y expandiendo sus negocios de bajo consumo de capital y generadores de comisiones como SCIB, banca privada y pagos.

«Os lo repito. No nos interesan las fusiones. En Europa harían falta cambios regulatorios para que esto fuese algo que nos pudiese interesar», ha sostenido Botín en la presentación de resultados del ejercicio 2020 ante analistas e inversores.

La directiva ha sostenido que el Santander tiene suficientes clientes y escala, con unos ingresos estables en un año complicado como 2020. «Eso es importantísimo y esa es la escala que queremos», ha asegurado.

La presidenta del banco sí cree que habrá más operaciones en este sentido en Europa, donde el nivel de concentración bancaria es muy inferior al de Estados Unidos, pero estarán protagonizadas por otras entidades.

Aunque Santander no participará en la consolidación en España o Europa, sí seguirá comprando negocios digitales, como ha hecho con Ebury o WireCard.

En cuanto a los cierres de oficinas, la presidenta del grupo ha explicado que el Santander está «siguiendo» el comportamiento de sus clientes, que operan cada vez más a través de canales digitales.

NEGOCIO DIGITAL

Botín ha hecho hincapié en que la estrategia del banco es apoyarse en la tecnología y en los negocios de pagos y de consumo para acceder a nuevas fuentes de ingresos por comisiones y alcanzar un crecimiento rentable. Pese a haber reconocido que en el primer semestre de 2021 las comisiones «podrían no tener tan buen desempeño» por la incertidumbre, Botín confía en que el segundo semestre será mejor, a medida que se reactive la economía.

En concreto, ha situado como prioridades estratégicas del Santander del futuro a One Santander, con un objetivo en Europa de un RoTE del 10-12% y una ratio de eficiencia del 45% en el medio plazo; PagoNxt, dando servicios de valor añadido en el mundo de los pagos a partir de activos existentes (Getnet y Wirecard en Europa), y Digital Consumer Bank, con la integración de Openbank y Santander Consumer para impulsar el crecimiento rentable en Europa y en nuevos mercados.

Botín ha destacado el «gran potencial» de este último negocio, ya que Santander Consumer Finance cuenta con 18 millones de clientes activos y Openbank cuenta con una media de 4,5 productos por cliente y una tecnología y capacidad de gestión de datos que «impulsan el crecimiento de ingresos, ofreciendo nuevos servicios y mejoras operativas».

La presidenta del Santander ha avanzado que en tres o cuatro años la forma en que el grupo gestiona el negocio de crédito al consumo experimentará «un cambio de paradigma». El objetivo a medio plazo es alcanzar un RoTE ordinario del 15% y una ratio de eficiencia del 39%.

«Santander Consumer es un negocio que nos ha dado 1.000 millones de beneficio en 2020, hay muchísimos clientes. Y Openbank no solo nos da experiencia de cliente, sino cómo gestionamos el negocio, funciones de soporte… Nos podemos expandir a Holanda y Alemania si queremos, con un incremento de costes muy pequeño y de forma prudente y controlada. En los próximos años veremos cómo esto se va materializando», ha afirmado.

«Por tanto, no tenemos en la cabeza ningún tipo de fusión o adquisición, sino que nos centraremos en el mundo digital», ha apostillado.

La presidenta del Santander ha asegurado que este crecimiento orgánico permitirá a la entidad generar más beneficio y volver «en cuanto se pueda» a un ‘pay out’ en efectivo del 40%-50%, devolviendo capital a los accionistas del grupo en el cuarto trimestre del año o a principios de 2022.

Según ha explicado, el ‘scrip dividend’ de 0,10 euros de 2020 era la única forma de dar en dicho año a los clientes retail «algo de dividendo, aunque fuera en acciones», pero los planes del grupo contemplan volver a una política de 100% efectivo.

Botín ha aclarado que con cargo a los beneficios de 2020 el dividendo se compondrá de los 10 céntimos de ‘scrip dividend’ y los 2,75 céntimos en efectivo que se repartirán este año, por debajo de lo aprobado en la junta de accionistas antes de que el BCE anunciase su veto a los dividendos.

En cuanto al dividendo con cargo a 2021, la directiva entiende que tras conocer las directrices del BCE a partir del cuarto trimestre la entidad podrá volver al ‘pay out’ del 40%-50% en efectivo.

INVERSIÓN EN PRISA

Preguntada por la posible intención de la entidad de salir del capital de Prisa, Botín ha explicado que espera recuperar «algo de la inversión» que hizo el Santander en su día.

«En Prisa, como en muchas otras empresas, hemos hecho nuestra labor como banco, hemos ayudado a levantar capital y esperamos recuperar algo de la inversión que hicimos en su día. Dependerá un poco del comportamiento y evolución de la empresa, que pensamos que será positivo», ha asegurado.