La cúpula de Naturgy cobrará su bonus aunque la compañía pierda un 40% de su valor

Recientemente, la compañía ha comunicado al regulador de los mercados españoles, CNMV, las condiciones de los incentivos a largo plazo de sus más importantes ejecutivos.

El presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, percibió una retribución total de 4,962 millones de euros en 2021, lo que representa un 9% más que los 4,549 millones de euros del ejercicio anterior, según el informe anual de retribuciones del consejo remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) por la compañía.

De esta cantidad total, 1,1 millones de euros corresponden a su sueldo como presidente del consejo y 960.000 euros son por el ejercicio de sus funciones ejecutivas.

Asimismo se incluyen 2,734 millones de euros en concepto por la remuneración por sistemas de ahorro -la retribución variable anual devengada- y otros 100.000 euros por otros conceptos.

La remuneración total del consejo de administración de Naturgy ascendió en 2021 a 7,817 millones de euros, incluyendo la retribución a largo plazo de Reynés, lo que supone un 5,5% más que en el ejercicio anterior.

Tras Reynés, el segundo sueldo más alto del consejo fue el de Ramón Adell, consejero coordinador, que percibió una remuneración total de 315.000 euros

Por otra parte, el consejo de administración de la compañía celebrado el pasado 1 de febrero aprobó la remuneración para 2022 de los consejeros por su pertenencia al órgano rector del grupo, que se mantendrá en los 1,1 millones de euros anuales para Reynés por su condición de presidente, en 175.000 euros para los consejeros y en 30.000 euros para el consejero coordinador.

En 2022 la retribución fija de Reynés ascenderá así a 2,112 millones de euros, incluyendo esos 1,1 millones de euros por ser presidente del consejo de administración y otros 1,012 millones de euros por sus funciones ejecutivas o delegadas.

Llama la atención que dentro de la remuneración variable de los altos ejecutivos de Naturgy, este se consiga siempre y cuando la acción no baje del entorno de los 19,5 euros, es decir, esa millonaria compensación se obtendrá aunque la compañía pierda aproximadamente un 40 por ciento de su valor, desde los 28 euros por acción a los que cotiza hoy. Paradójico e increíble que se premie millonariamente, incluso, una mala gestión.