El Centro de Investigaciones Económicas y Empresariales lo tiene claro: la economía de España debería ir mejor. Y por ello han decidido situar en nuestro país como la decimotercera mayor economía al cierre del presente ejercicio, un puesto por debajo del ocupado en el 'ranking' de 2011.

Y no es de extrañar este ranking si tenemos en cuenta sus previsiones: sobre la abase de los datos del Fondo Monetario Internacional y sus propias proyecciones de crecimiento, el centro calcula que el PIB español sumará en 2012 un total de 1 billón de euros, mientras que en 2002 apenas lo habrá aumentado un 2,2%. Con todo ello, este organismo londinense coloca a España como uno de los países con menor tasa de crecimiento de entre las 30 mayores economías mundiales de cara a los próximos diez años. 

Esta 'Liga económica mundial' tiene mejores noticias para países como Reino Unido, que recupera la sexta posición que había perdido un año antes por el empuje de Brasil. Por su parte, el país americano acaba 2012 en la séptima posición. Pese a la situación de la economía brasileña, este estudio constanta también la creciente fortaleza de las economías de los países emergentes. De hecho, apunta a que durante la próxima década, desplazarán a las europeas de las primeras posiciones del ranking.