UNESID: "Sufrimos las consecuencias políticas y la facilidad con la que se recauda en el recibo de la luz"

“El precio de la luz es nuestro verdadero drama”. Así de tajante se ha mostrado Andrés Barceló, Director General de la Unión de Empresas Siderúrgicas UNESID, quien ha explicado que la industria española ha pasado de tener los mejores precios de la electricidad a tener los peores. “Sufrimos las consecuencias de decisiones políticas y la facilidad con la que se recauda en la tarifa eléctrica”, ha lamentado. Y es que, explica, en la factura eléctrica se incluyen “cosas tan peculiares” como el apoyo a la minería del carbón o la extrapeninsularidad.

Barceló ha criticado también el sistema de formación de precios: “no es bueno y nuestra sensación es que los poderes públicos no han tenido la idea de hacer competitiva la energía para la industria”. Además cree que está pensado en un mix energético que ya no existe y con un prejuicio ideológico: que el mercado se regula sólo.  En este sentido, denuncia, por ejemplo, la falta de contratos bilaterales y que se recurra siempre al sistema marginal así como la ausencia de contratos a largo plazo, algo que sí que hay en Francia y Alemania. Pese a todo ello, desde UNESID confían en que la nueva reforma eléctrica que planea el Gobierno sirva para resolver el embrollo: “es complicado, pero sin clientes esto no funciona”.

Reindustrializar Europa

Junto con esta reforma energética, Andrés Barceló ha apostado también por una gran reindustrialización en Europa. Y es que, defiende, es la única manera de que el viejo continente se acerque al objetivo de que la industria represente el 20% de su Producto Interior Bruto. “Sin siderurgia no se puede hacer nada, porque asegura la cadena de suministros”, explica. Por ello, ve con buenos ojos la intención de Bruselas de poner en marcha un plan para la siderurgia.

Pero para que las plantas siderúrgicas puedan funcionar, necesitan demanda: “si no hay demanda en la construcción, si las familias no se cambian de coche o de electrodomésticos, no se puede inventar”. Sobre la construcción de viviendas, el director general de UNESID reconoce que no era lógico construir 800.000 viviendas al año, pero que tampoco es que esta cifra baje hasta las 40.000 viviendas. “Considerando que los españoles tardan en salir de casa, lo razonable es que se hagan unas 300.000 viviendas anuales”, ha cifrado.

De igual modo Barceló se ha referido a la obra pública: “es cierto que había que poner un freno a la política suicida de infraestructuras, pero entre eso y no hacer nada hay cosas intermedias”, ha señalado antes de apuntan que las administraciones tienen que ser conscientes de que el ahorro público no debe ir sólo por el ajuste de las inversiones.

Lucha contra el cambio climático

El director general de la Unión de Empresas Siderúrgicas se ha referido también a las políticas de cambio climático de la UE. Así, ha animado a Europa a que abandone el sistema de liderazgo por el ejemplo: “decidimos cambiar las reglas del juego sin tener en cuenta que las emisiones en Europa son prácticamente irrelevantes a nivel mundial”. De hecho cree que la política de cambio climático “está llevando a una desindustrialización de Europa pero no a una disminución de las emisiones globales” y que traer acero de China es altamente contaminante.

El lastre de los costes energéticos, junto con la caída de la demanda, han llevado al consumo de acero a niveles de los años 90. Pero Andrés Barceló cree que “posiblemente estamos tocando fondo”. Eso sí, la recuperación la ve todavía un poco más lejos y no la sitúa en este 2013.