En el auto, conocido este lunes, el magistrado asegura que la intervención no se justifica para prevenir la continuidad delilctiva. "La actual administración es completamente distinta a la que se encontraba al frente de la entidad cuando se cometieron los hechos objeto de la invetigación", defiende Andreu Fuente. Además, asegura que Bankia es, "de facto" una entidad intervenida por el Estado a través de una entidad de derecho público como es el Fondo de Ordenación y Reestructuración Bancaria.

Con todo ello, el juez sosteniene que no corresponde al Juzgado realizar actuaciones dirigidas al control de la situación financiera de Bankia, generar confianza en los mercados o llevar a su gestión factorres de transparencia destinados a conocer el estado real de la sociedad.