Hoy se celebra la primera junta de accionistas de Ana Botín en Santander, en la cual se mejorará el dividendo por acción un cinco por ciento, pasando de los 0,2 a los 0,21 euros por acción.

«El banco tiene intención de que la retribución con cargo al resultado de 2016 sea de 0,21 euros por acción, que se abonaría, como siempre, en cuatro pagos, de los que tres se recibirían en efectivo y el otro en acciones o efectivo a elección del accionista», apunta la entidad en su convocatoria de junta.

Con ello, Botín cumple su compromiso de mejorar el dividendo año a año para que el porcentaje de beneficio que se distribuye al accionista (pay out) se sitúe en el 30 y 40 por ciento en 2018.

Es un objetivo que ya se logró en 2015 al distribuir el 38 por ciento del beneficio y contando con el dividendo complementario que se aprueba hoy la entidad repartirá entre sus accionistas 2.268 millones en efectivo de los 5.966 millones que ganó el pasado ejercicio.

El dividendo fue uno de los grandes cambios que introdujo Ana Botín en su llegada a la presidencia de Santander. Rebajó un tercio los 0,6 euros por acción que repartía la entidad con su padre al frente y repartió la cuantía en efectivo y con mejoras anuales.