Imaz (Repsol) advierte de que “el teletrabajo no puede ser el futuro” y defiende los grandes campus empresariales

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, advirtió este jueves de que “el teletrabajo no puede ser el futuro” ya que, según su punto de vista, «mata la innovación, el trabajo conjunto de los equipos y el compartir experiencias», informa Servimedia.

Así se expresó Imaz en su intervención en el Foro Tendencias organizado por ‘El País’ y Kreab, donde, pese a sus advertencias sobre el teletrabajo, destacó que “nos ha venido de maravilla para salir de una situación de crisis brutal”.

En esta línea, el consejero delegado de Repsol alertó sobre la posibilidad de que las autoridades se planteen construir el futuro a través de la proyección de tendencias de corto plazo y puso como ejemplo que su compañía no va a apostar por los túneles de lavado aunque su uso se haya disparado en la pandemia.

En cuanto a la organización del trabajo, defendió que los grandes campus empresariales como el de Repsol o el de otras grandes compañías, constituyen una mejor alternativa ya que favorecen la innovación al permitir que la gente interactúe.

“El teletrabajo es útil para algunas cosas, pero pensar que el mundo va a vivir así, espero que no porque necesitamos interactuar y tocarnos en el mundo empresarial”, añadió.

En la misma línea, el consejero delegado de Abertis, José Aljaro, afirmó que “el trabajo continuo en casa no es bueno porque somos personas y necesitamos interactuar”. En consecuencia, abogó por un sistema mixto, en el que sí se puede plantear uno o dos días de teletrabajo a la semana.

“Hay que buscar el equilibrio entre la situación que había antes y la situación de los últimos meses”, añadió Aljaro, quien sentenció que “incorporar un nuevo directivo en un país y no ir a verlo no tiene ningún sentido”.

Por su parte, el presidente de Enagás, Antonio Llardén se sumó a las reticencias de sus compañeros de mesa redonda con el teletrabajo, algo, que según señaló, no puede plantearse en el 50% de los trabajadores de su compañía, aunque admitió que “hemos sobrevivido” gracias a él.

Además, defendió la importancia del contacto personal en ciertas reuniones, como las que se llevan a cabo con grandes inversores internacionales. “Lo más interesante es cuando te acompaña al ascensor y estás cinco minutos con él”, reveló.

“Eso se ha perdido y no tengo ninguna reunión presencial con inversores de aquí a final de año”, lamentó Llardén, quien aseguró que “necesitamos tener esos contactos”.